La autoestima normalmente se forja durante la niñez, pero forjarla en la edad adulta no es tan complicado como parece, sólo requiere trabajar intensamente en uno mismo, la capacidad de reacción y en las relaciones con los demás identificando las áreas fuertes y débiles que requieren reforzarse.
1. En cuanto al conocimiento que se tiene de uno mismo, es necesario saber cuáles son las capacidades y limitaciones, aceptar que se tienen debilidades que son perfectamente mejorables y fortalezas a las cuales se les puede sacar partido. Un área clave del conocimiento de uno mismo implica también comenzar a expresar los propios sentimientos y emociones con sinceridad, perder la vergüenza de expresarse ante otros, después de todo, casi todos sentimos lo mismo y no debemos temer a las reacciones de los demás, sino entenderlas y hacer respetar nuestra posición.
2. Para mejorar la capacidad de reacción, es bueno irse fijando pequeñas metas diarias, cumplirlas y irse imponiendo nuevos desafíos cada vez más complicados. Debes dejar de criticarte tanto y aceptar el fracaso como una opción que está presente en la vida de todas las personas, y si no te arriesgas a vivir, entonces ya habrás fracasado en tu intento por ser libre.
3. Para mejorar las relaciones con los demás, es necesario que expreses tu opinión a los demás y seas empática, capaz de ponerte en el lugar del otro. Es útil para reforzar la autoestima, contar con una red social de apoyo, tales como amigos, compañeros de trabajo y familiares. Además, tener un círculo amplio de conocidos te facilitará comenzar nuevos caminos, ya sea para emprender un negocio o encontrar un nuevo trabajo.
FUENTE PRESUMIDA.COM.DO
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